El Hermano Mayor es el máximo dirigente de la Cofradía o, lo que es lo mismo, el responsable del nutrido y variado grupo de personas que la componemos. Personas a las que, como el “buen pastor” de la parábola de Jesús (cf. Jn 10, 11-16), bien conoce y por las que se sacrifica, dedicando por ellas tiempo, esfuerzo y no pocas preocupaciones.
Queridos Hermanos y Hermanas:
Otro año más y llegadas estas fechas, tenemos en nuestras manos este programa con los principales actos que se van a desarrollar durante la Cuaresma y la Semana Santa de 2024.
Como Hermano Mayor de nuestra querida cofradía, y en nombre de la Junta de Gobierno, os invito a participar plenamente en todos los actos que hemos preparado con tanto amor y devoción, y que encontraras con más detalle en las páginas siguientes.
Cuando leáis estas palabras, cada uno de nosotros estaremos preparando todo lo necesario para poder salir en las procesiones y para que todo salga lo mejor posible. Cada uno, en su ámbito, intentará que así sea, desde la junta de gobierno en la organización de los actos, hasta el cofrade que nos acompaña y en un momento determinado tiene que ir a comprar una botella de agua. Queremos que todo quede bien, y que lo que estemos transmitiendo llegue al os que nos están viendo.
Pero no nos quedemos sólo en el exterior. La Semana Santa es un tiempo de reflexión y renovación espiritual. Nos ofrece la oportunidad de seguir los pasos de Jesús desde su entrada triunfal en Jerusalén hasta su resurrección gloriosa. Cada procesión, cada acto litúrgico, es una oportunidad para profundizar en nuestra fe y renovar nuestro compromiso con Dios y con nuestros hermanos y hermanas en la fe.
En estos tiempos de incertidumbre, cada uno de nosotros, tenemos una misión especial: sembrar la esperanza. Como cofrades, somos llamados a ser portadores de la luz de Cristo, a ser testimonio de su amor y misericordia en el mundo, en definitiva, a ser sembradores de esperanza en un mundo que a menudo parece oscuro.
¡Hermanos!, nuestra tarea es llevar esta esperanza a todos los rincones de nuestra sociedad, a través de nuestras palabras y acciones. Aprovechemos la Cuaresma para salir fortalecidos e inspirados para seguir sembrando la esperanza en nuestros corazones y en los corazones de aquellos que nos rodean, y así ser fieles testigos de la Resurrección de Cristo.
Este año, el Papa Francisco nos ha recordado en su mensaje de Cuaresma que "A través del desierto Dios nos guía a la libertad". Nos invita a ver la realidad, a escuchar el grito de los oprimidos y a abandonar nuestras ataduras opresoras. En este espíritu, os animo a que veáis la Semana Santa como un desierto que debemos atravesar juntos, guiados por Dios hacia la libertad.
Participar en las procesiones no es sólo un acto de fe, sino también una forma de solidaridad con nuestros hermanos y hermanas en Cristo. Al caminar juntos, compartimos nuestras cargas y nos apoyamos mutuamente en nuestro viaje espiritual.
Además, os animo a que os unáis a los actos litúrgicos, no nos quedemos únicamente con las procesiones. Estos momentos de oración y adoración son fundamentales para nuestra vida espiritual y nos ayudan a centrarnos en el sacrificio de Jesús y en su amor incondicional por nosotros.
Finalmente, os invito a que busquéis oportunidades de colaboración con otras cofradías y hermandades, con otras asociaciones, en definitiva, abrir nuestro corazón a los demás, bien sea a través de la obra social, o de las diferentes actividades que realiza la Cofradía a lo largo del año. Al hacerlo, fortalecemos nuestra comunidad cristiana y demostramos que, aunque cada cofradía tiene sus propias tradiciones y prácticas, todos compartimos la misma fe y el mismo amor por Dios.
En conclusión, os animo a que aprovechéis al máximo esta Semana Santa. Participemos, reflexionemos y renovemos nuestra fe. Recordar las palabras del Papa Francisco y buscar la libertad que Dios nos ofrece a través del desierto de la Cuaresma.
¿Encendemos la luz de la Esperanza? Yo lo haré, ¿te animas?
¡ILUMINEMOS LAS CALLES SEMBRANDO LA ESPERANZA!
Recibid un fuerte abrazo en Cristo,
Eduardo Sauras Moix
Hermano Mayor de la Cofradía