
Esta sección de la web nace con el único objetivo de acercar diariamente al lector a la historia de la bimilenaria e inmortal ciudad de Zaragoza a través de su larga tradición eclesial y de la ferviente devoción popular plasmada, principalmente, en la vida de sus cofradías y hermandades. Con la conmemoración de una de las tantas efemérides que se conmemoran cada día, buscamos una excusa con la que dar a conocer, aunque sea a través de unas breves líneas, lo que a lo largo de los siglos nos ha llevado a ser lo que somos: cofrades de Zaragoza.
La gran devoción existente en Zaragoza por el Obispo de Sebaste surge de los tiempos de la reconquista cristiana de la ciudad, al erigir en las afueras una ermita dedicada al Santo los señores feudales franceses que colaboraron con Alfonso I.
Pese a que en el año 1259 se constituiría en Parroquia bajo la titularidad de San Pablo, ese profuso fervor por el abogado y protector contra los males de garganta no quedaría relegado a un segundo plano, celebrándose con gran solemnidad el 3 de febrero, el día de su fiesta en el que la “tercera catedral” se convierte en centro de un continuo peregrinar de fieles que pasan a venerar sus reliquias, a orar ante sus imágenes (la gótica del siglo XV que preside su altar titular y el busto-relicario ejecutado a mediados del siglo XVI por el platero Andrés Marcuello y que sólo se expone al culto en este jubilar día) o asisten a la Misa mayor en la que se bendicen los alimentos -como las famosas roscas que evocan a las garlandas y golas- que les protegieran de sus afecciones.
Con el fin de seguir incrementando estos cultos y con la ayuda de su ilustre parroquiano Tomás Azpuru (Embajador de España en la Santa Sede), el Capítulo de San Pablo solicitaría a Clemente XIV la concesión del rezo propio de San Blas con su octava, tal y como se hacía en Venecia, componiendo para ello unos nuevos “gozos” dedicados al Santo o poemas populares divididos en coplas y con el estribillo «Denos, Blas, tu Protección, alientos de Fe, y de vida» y que recientemente se han podido recuperar gracias al trabajo de investigación llevado a cabo por las historiadores del Archivo Parroquial, Ana I. Bruñén y Trinidad Velilla.
Bibliografía: Bruñén Ibáñez, Ana I. y Velilla Marín, Trinidad: "Desde el origen, San Blas". "Rejolas. Colección de Arte e Historia" nº 2. Parroquia de San Pablo - Área de Patrimonio Cultural, Zaragoza, 2015.
El texto "Tal día como hoy ... 4 de julio" creado por David Beneded Blázquez para www.jesusdelahumillacion.org, se encuentra bajo una Licencia Creative Commons Reconocimiento-NoComercial 3.0 España. Zaragoza, 2015.
Imagen principal: Imagen gótica de San Blas presidiendo su altar en la Insigne Parroquia de San Pablo (fotografía de David Beneded).