Resumen de la Unidad

Resumen de la unidad

Concluimos la tercera unidad de este curso online que hemos preparado desde la Cofradía Jesús de la Humillación con la que hemos querido concienciar a todos los cofrades de que las procesiones las organizamos para acompañar a nuestras imágenes por las calles de la ciudad, pero que hay mucho más detrás de ellas, llegando a ser un símbolo de nuestra propia vida.

1º) Salir en procesión supone ponerse en camino.
- La palabra procesión procede del latín y significa “avanzar caminando”.
- Con las procesiones nos manifestamos y hacemos el camino bajo un profundo sentido bíblico.
- En la Biblia, las procesiones aparecen como manera de rendir culto a Dios y celebrar sus dones gratuitos.

2º) Las procesiones son expresión cultual de la Iglesia.
La Iglesia reconoce las procesiones en su liturgia como una forma de expresión de la fe, cuya celebración está motivada principalmente con el fin de:

- Excitar la piedad del pueblo cristiano.
- Conmemorar los beneficios de Dios en la historia
- Dar gracias por los beneficios obtenidos
- Implorar el auxilio divino en las necesidades.

3º) Las procesiones son expresión de la religiosidad popular.
- Somos herederos de una tradición iniciada con las “estaciones cuaresmales” de la primera Iglesia en Roma y con la “procesión de las Palmas” que la peregrina Egeria vio en la Jerusalén del siglo cuarto;
- A través de los siglos llega hasta nuestros días, donde las cofradías somos responsables de avivar la fe en la sociedad moderna.

4º) Las procesiones en el corazón de la vida de nuestra Cofradía.
- Con nuestra procesión del Domingo de Ramos, la Titular o también llamada del “Vía Crucis”: rememoramos la Pasión y Muerte de Jesús, desde su sentencia al lavarse las manos Pilato hasta su muerte en la Cruz; y recorremos el Vía Crucis: el “camino de la negación de sí mismo de Jesucristo, el camino del amor verdadero”.

- El Miércoles Santo con la Procesión de María Santísima de la Amargura: acompañamos a María en su dolor, tristeza y amargura; la reconocemos como Madre de Dios y Madre Nuestra, y modelo a seguir; e imploramos su intercesión ante su Hijo y su protección para emprender una vida auténticamente cristiana.

- Y el Viernes Santo al participar en la “Procesión del Santo Entierro”: formamos parte de la mayor manifestación catequética y con más arraigo popular de cuantas se celebran en Zaragoza; cumplimos con el compromiso que adquirimos en nuestra fundación con la Hermandad de la Sangre de Cristo; y superamos el cansancio y las dificultades para asistir al entierro de un Amigo, de un Hermano: Jesús.

5º) La procesión es símbolo de nuestra propia vida.
- Porque todo lo que hacemos al procesionar tiene un significado, expresa lo que vivimos (o queremos vivir) durante el resto del año.
- Y, viceversa, el procesionar nos ayuda a encontrar significado a nuestra vida creyente durante todo el año.

Resumen

¡Muchas Gracias! Y os esperamos en la siguiente unidad de este curso "¡Conoce tu Cofradía!, ¡Ama tu Cofradía!"